jueves, abril 02, 2009

Día 608, jueves

Era una historia un poco larga, pero si Takeshi estaba dispuesto a escuchar, Sarah no tenía ningún problema en contarla. Se sentaron justo donde habían encontrado al gato muerto la noche anterior. Ella le contó entonces que solía trabajar en una estación de servicio con un chico que, al principio, le caía muy mal, pero que, en un momento difícil de su vida, se portó muy bien con ella. "Cuando todo estaba desmoronándose en mi vida, fue él quién me dio las fuerzas suficientes para seguir", le dijo. Al parecer, este chico y Sarah iniciaron un tormentoso romance cimentado en las noches que pasaron juntos en la estación de servicio. Con el tiempo, la relación entre ellos se hizo cada vez más tormentosa. "Él era depresivo. Nada lo hacía feliz. Fue él quien me habló por primera vez de la Asociación. Incluso, pensábamos venir ambos aquí, huyendo de la vida que llevábamos afuera". Una noche, sin embargo, él no llegó a la estación de servicio. En lugar de eso, su familia lo encontró ahorcado del techo de su habitación. Había usado una viga suelta y la correa que todos los días se ponía para ir a trabajar. Después de eso, Sarah no lo pensó mucho antes de pagar los 200 dólares y partir de inmediato al campamento de la Asociación.